Coordinación y control entre la formación del coste de producción y el centro de ingresos (caso práctico)
Resumen
La empresa al expansionarse alcanza más complejidad, su mayor dimensión requiere realizar una progresiva descentralización de las decisiones, para permitir que las tareas operativas sean ejecutadas por quienes conocen el día a día de los avatares cotidianos.
Hoy en día en la empresa moderna industrial, cuando se han superado los problemas técnicos que subyacen en todo proceso de elaboración de los productos, se concede gran importancia a la división comercial o de ventas, que es la encargada de incentivar la colocación en el mercado de la producción, que es capaz de generar una fábrica cuando está a pleno rendimiento.
Un centro de ingresos es un centro cuyo responsable controla aquellas variables que permiten y condicionan la consecución de un mayor o menor nivel de la cifra de ventas, sin afectar a los costes. Dado que los productos suelen tener márgenes diferentes, la actuación de este tipo de centros influye en la composición de las ventas (1).
El responsable del centro de ingresos necesita, al comienzo de cada año, conocer los costes estándar de fabricación, para utilizarlos en la fijación de la tarifa de precios. Es imprescindible la coordinación y el control entre la división fabril de la empresa y la comercial.