Hurto. Robo con fuerza por utilización de tarjetas de crédito hurtadas

Resumen

El pasado 7 de junio de 2009, sobre las 12:30 horas, Ana María se encontraba en el interior del convoy del metro de la Línea 1, concretamente en la estación de Sol, existiendo en ese momento una gran cantidad de usuarios en el interior del referido convoy, lo cual fue aprovechado por Jesús para abrir el bolso de Ana María y sustraerle la cartera sin que la misma se apercibiera de nada. Una vez que Jesús salió a la calle se introdujo en un portal a fin de poder registrar la cartera, encontrando en su interior 55 euros de los que se apoderó, así como una tarjeta de crédito con un número apuntado en un papel en el reverso de la misma. Suponiendo que dicho número correspondía a la clave de la tarjeta, se dirigió inmediatamente, y antes de que Ana María pudiera percibir la sustracción de su cartera, a un cajero automático, al cual accedió pasando la barra magnética de la tarjeta por el cierre de la puerta. Una vez en el interior procedió a introducir la tarjeta de crédito en el cajero marcando el número secreto que constaba en el papel, si bien tras el tercer intento la tarjeta se bloqueó, por lo que abandonó el banco inmediatamente. Ana María en previsión de posibles robos había colocado en el reverso de la tarjeta de crédito el papel con un número que no correspondía a la clave de acceso, a fin de que al tratar de extraer dinero con la misma quedara bloqueada.