Conducción etílica. Imprudencia
Resumen
El 25 de junio de 2000, Luis Costa López, mayor de edad y ejecutoriamente condenado por un delito contra la seguridad en el tráfico el 21 de febrero de 1996, circulaba con el vehículo XX-4444-DI, asegurado en la Compañía Iris, por la Carretera Nacional 232, dirección Santillana de Prados, dentro del término municipal y en fiestas patronales, convenientemente anunciadas a la entrada del pueblo del mismo nombre, notoriamente transitado por personas. Al intentar sobrepasar una cerrada curva muy pronunciada a la izquierda, y como quiera que su velocidad era superior (70 kms/h) a la permitida (50 kms/h) y que sus facultades psicofísicas resultaban seriamente disminuidas a consecuencia de una ingestión previa de alcohol, efectuó un giro brusco con el volante, provocando el descontrol del vehículo y la colisión fronto-lateral con un viandante, al salirse de la calzada y colisionar con éste y con el vallado existente.
El ciudadano falleció inmediatamente por consecuencia de un traumatismo cráneo-encefálico severo.
Practicada la correspondiente prueba de alcoholemia con el aparato marca Dráger, debidamente calibrado y revisado, dio como resultados: 1,19 miligramos de alcohol por litro de aire espirado y 1,16 la segunda prueba, con una periodicidad de 30 minutos. El conductor renunció expresamente a otra prueba por extracción sanguínea.
