Estudio preliminar
Retos evolutivos pendientes de justicia constitucional: más «tradición-regresión» que «innovación-progreso»
DOI:
https://doi.org/10.51302/rtss.2018.1452Abstract
«Pleitos tengas (en el TC), y los ganes (si tienes la fortuna de que te admitan)». Escribía recientemente el actual presidente del Tribunal Constitucional (TC) español, a propósito de una entrevista profesional conmemorativa del 40 aniversario de la Constitución, que se había marcado, para todo su mandato –iniciado en marzo de 2017–, dos grandes objetivos. El primero, continuista, a fin de que el TC «continúe cumpliendo» su papel de «intérprete supremo» de la Constitución. El segundo, más innovador, de modo que el TC «sirva verdaderamente al ciudadano mediante una eficiente y eficaz impartición de justicia». A tal fin, planteaba reducir la pendencia de los asuntos (justicia no dilatoria), generalizar las «sentencias de gran calidad jurídica» y modernizar la institución mediante una mayor transparencia para la ciudadanía de la función constitucional.